Leyre Ahechu, alumna de 2º ESO, ha explicado cómo decidieron elegir el tema y cómo fueron los inicios de la investigación. “Al principio dudamos bastante entre varios temas que habíamos seleccionado como posibles. Nos decantamos por estudiar el problema de la procesionaria porque es una plaga muy extendida en nuestra región y podía tener una mayor aplicación práctica en nuestra zona”, ha asegurado.
“Al final, todo funcionó muy bien y llegamos a la conclusión de que la oruga procesionaria no es tan peligrosa para el medioambiente como dicen ya que tiene un papel en el ecosistema.”
– Leyre Ahechu, alumna de 2°ESO del Colegio Miravalles (Navarra)
La gran sorpresa de la investigación fue comprobar cómo la hipótesis que los alumnos del Colegio Miravalles habían planteado no era correcta. “Sacamos conclusiones muy distintas de las esperadas”, reconoce Leyre, quién también destaca que el problema principal de la oruga procesionaria es que es una “amenaza para la salud tanto de las personas como de las mascotas”.
El balance que hacen los profesores del Colegio Miravalles también es muy positivo. Ana María Simón Yarza, maestra de Ciencias de secundaria, asegura que “los Premios Fundación Endesa a la Ecoinnovación Educativa son una oportunidad de mejorar en la sensibilización del centro en problemas medioambientales y de trabajar y motivar a alumnas de alto rendimiento. Estas alumnas necesitan que se trabaje con ellas en proyectos que mejoran mucho su motivación siendo un buen cauce para desarrollar su potencial de trabajo y de profundización”.
Ana María cuenta que el punto de partida de la investigación estaba claro. Las alumnas no pertenecían a la misma clase, así que decidieron buscar lugares y momentos comunes para trabajar y repartir las tareas. El lugar escogido fue el recreo. “Esta forma de trabajar fue muy buena ya que las alumnas traían su trabajo personal que se ponía en común y se discutía en las reuniones semanales. Tuvimos que adaptarnos a distintas maneras de trabajar y de enfocar los problemas, así como a la toma de decisiones cuando se abrían varias posibilidades”, dice la profesora.
“Una parte muy interesante de este proyecto fue que, conforme avanzábamos en conocimiento, la realidad que nos encontrábamos era muy distinta a la hipótesis inicial.”
– Ana María Simón Yarza, maestra de Ciencias de secundaria del Colegio Miravalles (Navarra)
Tal y como cuenta Ana María recibir el galardón “fue una gran alegría” puesto que eran “un grupo pequeño y fue muy motivante para las alumnas poder acudir a Madrid a recibir el premio”.